#EscritoresEspañoles
Enamorarse es fácil. Uno puede enamorarse —sin demasiado esfuerzo— varias veces al día, a nada
Tendría alrededor de ochenta años, estaba atascada en un semáforo, como un barquito de vela bajo la tormenta,
Esta noche, por lo que a mí respecta bien podría saltar el mundo en mil pedazos. Por qué no. Y nosotros con él. Acabar. Echarle de una vez
No es que moleste en sí, pero cuesta acostumbrarse. Eso de que vayas por ahí
Ya poseemos casi todo lo que nos iba a hacer felices. Puede decirse
Cosas de la edad, supongo: te da por mirar atrás,
Mujeres como tú son las que consiguen que se declaren las guerras y que algún general
A veces —cuando observa en los bares la sana desvergüenza de los jóvene… los rescoldos de una oscura pasión avivan su mir…
Como a veces nos viene a la memoria algo sin importancia que dejamos para el día siguiente
Es inútil buscarlo. Cuando menos lo esperas, aparece en un bar. Y ya nada es igual en adelante. Un día tocas los dientes de la gloria,
Sale de la marquesina y mira hacia la izquierda; vuelve y reinicia su pequeño “claqueteo” nervioso. No aguanta más, se muere, necesita
Ándate con cuidado, que no se entere nadie de que lo pasas bien, que tu vida funciona, y eres feliz a ratos.
Después de haber visto el mundo, a través de una botella, durante más de quince años, ahora –pasada ya la cumbre de la r…
Tienes veinte años, tienes a la vida por el cuello a tu merced; pero no es suficiente,
En todas las ciudades que he pisado me ha parecido verte: un autobús que arranca y que no cojo,