Solo como Borges en el fondo de la rosa torturado por báculos de plata espejos laberintos
A tu ancho cuerpo de jade y plata vuelvo, jinete de manos verdes y pleno cuerpo verde de fosforescencias nocturnas.
Te propongo la dulzura del higo, su carne sonrosada, replegada y húmeda como un animal marino.
Esa mentira inmensa que es Nueva York quema mis labios a la medianoche cuando flamean las cabezas derriba… en cada piedra de la ciudad
Con sus garras de ónix, puntual, ordeña la muerte cada uno de nuestros días, y los sorbe insaciable
Bajo el ala de la noche que deja su huella imprecisa bajo la sombra del corazón repudiado
Qué difícil contarte esta verdad, porque tú no sabes nada sobre su vestimenta leve, que se va deslizando por los huesos
Amo mi casa por sus cuatro viejos costados llena de voces y ruidos: casa de adobe y machihembre que se queja por la noche
Por recorrer tu piel a pedacitos olvidé la piel agrietada de la patria, dejé de andar por sus caminos, no llegué hasta sus aldeas,
Yo miraba tus manos e inventaba historias de aleteos sobre mis pechos, de roces suavísimos
Mentira: el perfume la voz el encaje la mujer de plástico
(En una retrospectiva de Ed Kienh… Vertiginoso, el paisaje es apenas otra nostalgia que inicia la mañana.
Casi podría decirte devorada por la angustia me asomo a la vieja cueva prohibida donde habitan
Un desangrarse lento remontable hasta la más pérfida belleza hasta el misterio de la carne iner… un ciego encadenarse
Para Susana y Rigoberto Juárez P… Una misma insurrección morada, una misma, persistente memoria guardada por siglos en semillas,