LETRILLAS. II.
#EscritoresEspañoles Letrillas
Cuando a mi pobre aldea feliz escapar puedo, las penas y el bullicio de la ciudad huyendo, alegre me parece
Los ojos tristes, de llorar cansad… alzando al cielo, su clemencia imp… mas vuelven luego al encendido llo… que el grave peso no los sufre alz… Mil dolorosos ayes desdeñados
Merced a tus traiciones al fin respiro, Nice; al fin de un infelice el cielo hubo piedad. Ya rotas las prisiones,
Decidme, zagalejas, si visteis a mi amada bajar con sus corderas por esta verde falda. Decidme si la visteis,
Al ir a despedirme, temiéndose mi olvido, me dio para memoria Dorila un Cupidillo: diciéndome: «En mi seno
Viendo el Amor un día que mil lindas zagalas huían de él medrosas por mirarle con armas, dicen que de picado
Cuando la sombra fúnebre y el luto de la lóbrega noche el mundo envue… en silencio y horror, cuando en tr… reposo los mortales las delicias gustan de un blando saludable sueñ…
Doquiera que los ojos inquieto torno en cuidadoso anhelo… allí ¡gran Dios! presente atónito mi espíritu te siente. Allí estás, y llenando
Por morar en mi pecho el traidor Cupidillo, del seno de su madre se ha escapado de Gnido. Sus hermanos le lloran,
En esta breve tabla, discípulo de Apeles, cual yo te la pintare, retrátame mi ausente. Retratada cual sale
¡Oh dulce tortolilla! no más la selva muda con tus dolientes ayes molestes importuna. Deja el arrullo triste,
Cuando mi blanda Nise lasciva me rodea con sus nevados brazos y mil veces me besa, cuando a mi ardiente boca
Pensativo y lloroso, contemplando cuán tibia Dorila mi amor oye por hermosa y por niña, al margen de una fuente
¿Qué te pide el poeta? di, Apolo, ¿qué te pide cuando derrama el vaso, cuando el himno repite? No que le des riquezas
¿De dónde alegre vienes tan suelta y tan festiva, los valles alegrando, veloz mariposilla? ¿Por qué en sus lindas flores