Haiku 37
11/05/2016
#Haiku
La rana duerme, tranquilidad nerviosa. ¡Puede saltar!
¡Dios! me arrepiento, a ellos pido perdón, Tú, ¿me ayudaste? Fui tan frágil, tan débil sobre todo, tan sola.
Croa la rana, salta al oscuro charco. Mira al nenúfar.
Hermosa palabra, llena de esos matices que irradian vida. Es cuando el mar y el cielo se funden en un beso.
Gracias te doy por estar presente en el día a día. Tu amistad sincera es regocijo y aliento.
Grabo el instante, es el reto a seguir, y... llegas tú.
La decepción, tanto desengaño y desilusión. Es la gran frustración, el fiasco de la vida.
Si los suspiros mueren en el oído de quien los causa, la vida fuera mucho más bella y placentera.
Cuando me abrazas, la vida se detiene. Es el consuelo de unir nuestros latidos y entregarnos los dos.
Te observo lleno de años y de hist… decorando el final de ese sendero, y tú, árbol milenario te alzas fie… donde amarillas flores ríen gloria… Te miro y oigo todas tus memorias
¡En el silencio! siento el cálido arrullo de las palomas.
Nueva vida latía en su interior. Su juventud extrema, arropaba su vientre
Cuando dormimos, vuela nuestra conciencia, si...¡no hay insomnio!
Regreso como cada día por esa calle tan habitual, siempre a la misma hora, como inevitable rutina a la que nos somete la vida. Encima de mí, un cielo de invierno donde no se oye el cant...
¡Linda es la vida! En un mundo de penas, siempre habrà flores.