#EscritoresChilenos
Herminda de la Victoria murió sin haber luchado derecho se fue a la gloria con el pecho atravesado. Las balas de los mandados
Quién me iba a decir a mí, cómo me iba a imaginar si yo no tengo un lugar en la tierra. Y mis manos son lo único que tengo
Del poeta y cantor Atahualpa Yupanqui Preguntitas sobre dios Un día pregunte yo ¿abuelo donde esta dios?
Fui soldado de Francisco Villa de aquel hombre de fama inmortal que aunque estuvo sentado en la si… no envidiara la presidencial. Ahora vivo allá por la orilla
Qué saco rogar al cielo si en tierra me han de enterrar, la tierra me da comida, la tierra me hace sudar. Qué saco sudando tanto,
Ingrata goza tu gusto déjame a mi padecer. Que una sola vida tengo y por ti la he de perder. Ay mi palomita
Arrímese mas pa’ ca aquí donde el sol calienta, si uste’ ya está acostumbrado a andar dando volteretas y ningún daño le hará
Donde cayó Camilo nació una cruz, pero no de madera sino de luz. Lo mataron cuando iba
Si yo a Cuba le cantara, le cantara una canción tendría que ser un son, un son revolucionario, pie con pie, mano con mano,
Soldado, no me dispares soldado. Yo sé que tu mano tiembla soldado, no me dispares. ¿Quién te puso las medallas?
La hierba de los caminos la pisan los caminantes y a la mujer del obrero la pisan cuatro tunantes de esos que tienen dinero.
A ti te llamaría Ana, te llamaría Juana, te llamaría Rosa, te llamaría hermosa
Las casitas del barrio alto con rejas y antejardín, una preciosa entrada de autos esperando un Peugeot. Hay rosadas, verdecitas,
Qué sabes de cordillera, Si tú naciste tan lejos Hay que conocer la piedra Que corona al ventisquero; Hay que recorrer callando
Un sueño soñaba anoche, soñito del alma mía, soñaba con mis amores, que en mis brazos los tenía. Vi entrar señora muy blanca,