Almas del cielo,
del purgatorio del infierno
Almas que se necesitan.
Y hay seres que provienen
del escarnio, la carroña y el hartazgo,
concebidos, en una cínica verdad
que es la mentira.
Para ellos siempre habrá un lugar
porque son:
la malicia necesaria de los tiempos,
los que nunca, lejos lleva el viento
y serán siempre un mensaje destructor.
Son banalidades aterradas,
son los obsecuentes de la nada,
de una nada convertida en actitud.
Hay que dejarlos que se cuecen y correrse.
que el polvo del odio que se esparce,
penetra en las entrañas mas voraces,
y se asienta en las penumbras que sin Luz,
necesitan de la Luz de los ajenos,
para transfundir todo el veneno
convirtiendo lo lozano, en decrepitud.
Son ellos Sancho.