En tiempos de la República de Solrac en donde la confrontación entre los ciudadanos era ríspida, había acusaciones mutuas y temían algunos ciudadanos ilustres que hasta pudiera ser sangrienta.
Por tal razón uno de ellos, decidió consultar al mas antiguo del Consejo de Ancianos, sobre la conveniencia o no, de crear una fuerza pública capaz de impedirlo, y así se lo expresó.
Una vez escuchado el anciano manifestó:"no lo creo conveniente, porque antes que de que fuéramos República, hubo una fuerza pública, que se apropió del poder con los mismos argumentos que usted ahora me menciona, Y con la fuerza de las armas, persiguieron a ciudadanos, subieron los impuestos, beneficiaron a a los aristócratas, y mataron a quienes se les opusieron, logrando someter, entristecer y oscurecer el porvenir. Pero lo extraño, es que hubo ciudadanos que dieron su consentimiento y hasta se podría decir que estuvieron “encantados”. Y entonces anciano? dijo ya algo nerviosos el ciudadano ilustre..." Que ocurra lo que tiene que ocurrir, que nuestros ciudadanos aprendan a discernir, y elijan, entre quienes mienten y ocultan sus intenciones egoístas y quienes no", y continuo,"también es cierto, que hay nuevos ciudadanos, confiemos en ellos. Posiblemente tendremos que atravesar, aún, un periodo largo, difícil y tumultuoso".
“Las dictaduras no solo forman esclavos; van mucho mas allá, atraviesan con el miedo los espíritus débiles e imponen la sumisión, hasta convertirlos en seres sin alma (desalmados),portadores de la crueldad, la indiferencia, faltos del deseo de aprender, soberbios y sectarios”.
“Mentes y emociones sin alma, que por muchos años, serán convocados para el odio, la injusticia y la mentira... Si lo deseas puedes irte Ciudadano”.
El Ilustre Ciudadano caminó unos pasos, se detuvo y recapacitó. El anciano había sido memorioso y le había transmitido sus enseñanzas y le había dicho la verdad...
" La esperanza y el amor, tendrían que ser fuerte, para poder transitar y superar, lo que había dejado la *desolación"
El Inconsciente Ciudadano – ( VIII .XV ) – del filósofo Luar de Santelmis
*desolación: Sensación de hundimiento o vacío provocada por una angustia, dolor o tristeza grande.
(2014)
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