En Ávila, mis ojos...
SIGLO XV
#EscritoresAndaluces #EscritoresEspañoles #Generación27 (1924) Marinero en tierra
Si Garcilaso volviera, yo sería su escudero; que buen caballero era. Mi traje de marinero se trocaría en guerrera
Siempre andar de bajada o de subid… entrar, salir y entrar… ir al merc… ¿A cómo están los huevos? ¿Y el p… Se va en comer y en descomer la vi… Ir a los templos, ya la fe perdida…
Dicen que hay toros azules en la primavera del mar. El sol es el caporal y las mantillas las nubes, que las mueve el temporal.
Toca la campana de la catedral, ¡Y yo sin zapatos yéndome a casar! ¿Dónde está mi velo,
!Contigo, Rafael Arcángel, patrón de los caminantes! Chinita blanca del río, se me ha perdido mi amante. Rodando, rodando, al mar.!Contigo…
Zarza florida Rosal sin vida. Salí de mi casa, amante, por ir al campo a buscarte. Y en una zarza florida
Te invito, sombra, al aire. Sombra de veinte siglos, a la verdad del aire, del aire, aire, aire. Sombra que nunca sales
«Como tierra de cactus y magüeyes, de órganos que edifican verdes tem… con bóvedas de aire, con techumbre… limpísimas de aire, sol y agua. Los caminos se cansan, se desploma…
«Trata de no mirar sus monumentos, caminante, si a Roma te encaminas. Abre cien ojos, clava cien retinas… esclavo siempre de los pavimentos. Trata de no mirar tantos portentos…
Toca la campana de la catedral. Y yo sin zapatos, yéndome a casar! Donde esta mi velo,
¿Por qué me miras tan serio, carretero? Tienes cuatro mulas tordas, un caballo delantero, un carro de ruedas verdes,
Yo te arrojé de mi cuerpo, yo, con un carbón ardiendo. —Vete. Madrugada. La luz, muerta en las esquinas
«—Sería de aquí, de Toledo, de una de estas calles quebradas, de estas grietas profundas por donde un hombre con los brazos en cruz no cabría; de uno de estos enjutos pasillos, hechos m...
No dormiréis, malditos de la espad… cuervos nocturnos de sangrientas u… tristes cobardes de las sombras tr… violadores de muertos. No dormireis.
Príapo: ...Despierta, sí, cerrada caverna de coral. Voy por tus breñ… cabeceante, ciego, perseguido. Ábrete a mi llamada,