#EscritoresAndaluces #EscritoresEspañoles #Generación27 (1925) La amante
Blanca-nieve se fué al mar, ¡Se habrá derretido ya! Blanca-nieve, flor del norte se fué al mar del mediodía, para su cuerpo bañar.
Por allí, hondo, una humedad ardie… blando, un calor oscuro el que all… sofocado anhelar el que se hundía, doblándose y muriendo largamente. Labios en labios que no ataca dien…
¡Amor!, gritó el loro (Nadie le contestó de un chopo al… ¡Amor, amor mío! (Silencio de pino a pino.) ¡Amooor!
A ti, nocturno, por la luz herido, luz por la sombra herida de repent… arrebatado, oscuro combatiente, claro ofensor de súbito ofendido. A ti, acosado, envuelto, interrump…
De pronto, en Roma no hay nadie: no hay ni perro que me muerda, no hay ni gato que me arañe, no hay ni puerta que se abra, no hay ni balcón que me llame,
Vosotros habéis sido, vosotros que dormís en el vaho sin… para que el alba más desgraciada o… vosotros habéis sido la causa de e… Ni un solo pájaro es capaz de bebe…
Un año, ya dormido, alguien quien no esperaba se paró en mi ventana. —¡Levántate Y mis ojos vieron plumas y espadas.
Entraña de estos cantares: ¡Sangre de mi corazón, tarumba por ver los mares! El mar. La mar. El mar. ¡Sólo el mar!
Hombres de mar, eterno buscador que nunca encuentr… en el horizonte azulado del cielo… eternas despedidas, regresar quizá… partes siempre mirando el horizont…
Me digo y me retedigo. ¡Qué tonto! Ya te lo has tirado todo. Y ya no tienes amigo, por tonto. Que aquel amigo
«¿Son hombres de rodillas sobre el… perros, terribles monos sobre el m… movidos por dos hojas de madera, gritando, aullando, limándose los… contra el filo movible de las olas…
Guerra a la guerra por la guerra.… Vuelve la espalda. El mar. Abre l… Contra una mina una sirena choca Y un arcángel se hunde, indiferent… Tiempo de fuego. Adiós. Urgenteme…
Si mi voz muriera en tierra llevadla al nivel del mar y dejadla en la ribera. Llevadla al nivel del mar y nombardla capitana
Que eres loba de mar y remadora, Virgen del Carmen, y patrona mía, escrito está en la frente de la au… cuyo manto es el mar de mi bahía. Que eres mi timonel, que eres la g…
....Y ya estarán los esteros rezumando azul de mar. ¡Dejadme ser, salineros, granito d… ¡Qué bien, a la madrugada, correr en las vagonetas