Cargando...

Soliloquio de la mar

Hoy me acerco a vosotros con tristeza.
El color de madrigal de mi frente,
mi alegría de cabellera despeinada,
no alimentan ocasos violetas
ni pestañas de luto
ni corazones rotos en desvanes.
Heredé de mí misma la costumbre
de estar siempre dispuesta a lo que salga:
el salmón de la luna o el riesgo de la muerte,
la noche del odio o el bandazo del horizonte.
Temo a los que aún no saben amarme,
a los que ponen sus temores
bajo el signo de las lágrimas.
Si de algo os acuso es de haber olvidado
mi rompiente manera de llorar.
Preferido o celebrado por...
Otras obras de Pedro García...



Top