#EscritoresArgentinos
Oscurece. El silencio De las cosas ya cansadas Pone apuro en las tinieblas. Aguardo –entre las sombras– Corona de palabras tuyas
Tus labios han deletreado una sonrisa. Las palabras declinan como ocasos sobre los pétalos de los caminos.
Cansancio de cielo llovido Sobre el paisaje claro Y cariño de barrio dejó En cada balcón sin luz. Pesadumbre de una dicha
Aurora Lámpara enredada en un camino de horizontes. Después, al mediodía, en el aljibe se suicida el sol.
La emoción tira de nuestras almas. El corazón se nos abre para amar mejor. Sentimos todo el cielo latiendo en nuestras manos.
La tarde muere como una eremita. Sobre la espalda de la noche el cielo se estremece apretado de… La noche crispada y lenta se apega a los faroles,
La tardecita mansa pisoteada por tinieblas. Las hojas son corazones sobre el l… y los arbolitos de la mano
Todo el dolor derramado sobre el paisaje. La tarde transparente como un agua se ha mirado en tus ojos.
Una nañanita azul el sol cayó en mis manos. Los rayos se pasearon por los cami… mis brazos. El beso de oro
En nuestros labios quisieron enarb… como ponientes los gritos. Luego, los horizontes se romperán… cuerdas y mi corazón vendrá a mí d… Mi corazón ¡tantas veces ido!
El sol se había caído con las alas rotas sobre un Poniente. Tus ojos se llenaron de crepúsculo… Vino el vacío eterno de tu presenc…
La tarde se va de la mano del sol. La noche es un largo silencio negr… La luna es el alma de la noche. ¡Si yo fuese tan sólo tu corazón p…
Por aquel brazo por el cual desciendes llegarás a la mano. ¡La mano abierta enseñándote a amar!
Ventana abierta sobre la tarde con generosidad de mano que no sabe su limosna. Ventana, que has ocultado en vano tanto pudor de niña.
En el corazón de cada árbol se ha estremecido la medianoche. La noche se desmenuza en lenta procesión de niebla. Todas las tardes terminan su cansa…