De amor gritaba
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De donde eres Para encontrarse en el telar De mi corazón Ardiente. Corazón
Madre, yo quiero, cuando muera Un entierro pero muy sencillo, Con mi estandarte rojo, azul, amar… De flores adornada mi bandera. Madre, yo quiero, cuando muera
Sueña muy lindo, hermoso pajarito Cantas tus melodías peregrinar, Tu que eres el ángel de los cielos Y me adoras como nadie jamás. Lleva muy lejos mis tristes penas,
Ángeles de amor me están guardando Con su luz primera me siento bende… Y el verdugo como siempre acechand… En el camino largo del hombre perd… Y escucho ya, a sus mágicas palabr…
Desde mi infancia he vivido crecie… Acompañado con seres de luz y de c… Que perfeccionaron mi voz con enca… Y así con gran amor he vivido crey… Los pocos años de mi búsqueda vací…
Cuentan los hombres dignos y sabios merecedores del amor. Que en los primeros días hubo una mujer muy hermosa aquí en la tierra, que congregó a los buenos hombres y les mando a construi...
Pinta, que mi Dios el pintor A sus Ángeles amados, En nubes y color dorados Se ven bellos al alrededor. Pinta con amor y el pincel
Allá donde se ve esa mujer Con sus ojos terrenales Parecen limpios cristales Ojitos dulce de querer. Donde soñados muestra
San Arcángel Miguel, ángel de la… E imploro misericordia a mis enemi… Y apartaos de mi, como tu lo desea… Lucero de la mañana que nos proteg… Todo mal, te ruego que desde hoy c…
Porque para mi el amor es un fraca… En lo amargo e injusto Que suele ser la vida; En fin, es una tregua merecida Para los que nacieron
Aquí estás, Desnuda, Sobre las sábanas lujuriosas De ese cama donde te deseo. Veo tu cuerpo,
Así que no podría ser tan tarde qu… Aunque el corazón sea todavía amor… Y el sol sea todavía tan brillante El sentimiento no podría ser renco… Pero el corazón gasta su vaina,
Mi mayor conquista Cerca de mi vista Y lejos de mi vida Mi Lorena prohibida. Para mi bien te amo
Entre las canciones de las amaneci… Los cantantes de radio Distribuyen todas sus canciones de… Sobre los corazones húmedos, Y como un adivino:
La naturaleza nunca cambia, aún menos si la necesidad es conservadora por no decir e interesada; es necesario pasar por una grave necesidad divina para sujetarla fuertemente. Así el mal...