BÉCQUER
Historia de un perro rescatado
Hoy se me ha partido
como tableta roja de chocolate amargo
a manos de la razón
y ha rugido
y ha bramado
y ha gemido
y ha temblado
y se ha retorcido
y se ha quebrado
el corazón.
Mi Bécquer,
¡pero qué alma más hermosa!
Son estas primeras horas sin ti
un llanto desconsolado,
miro el jardín que llenabas
tan sólo hace unas horas
y veo la inocencia de tu rostro
en el murete gris bajo el jazmín
y te veo asomarte por cada rincón
con un alma que me invade
y me destroza el corazón.
¿Cómo se puede querer tanto.
manecilla minúscula de reloj?
El misterio no está en mí
sino en la fibra de tu alma,
eres amor recién brotado,
dos pequeñas hojuelas verdes
que no volverán a su maceta
y en el cántaro se seca
la tierra de mi corazón.
Hoy que todo el mundo
habla de El Rocío,
hoy que todo el mundo
mira a Sevilla,
hoy me pregunto
cuántas almas como tú
son invisibles en sus plegarias.
Hoy que todos hablan de
cultura y tradición,
hoy más que nunca
contemplo el absurdo de un mundo que se conmueve
con el color y la apariencia
y pasa de largo
y pasa de largo
y pasa de largo
y pasa de largo
y pasa de largo
cuando un alma como la tuya
les cruza el llanto.
Hoy más que nunca,
almas como la tuya
dignifican el mundo
y lo hacen merecedor
de tan noble belleza.
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