Aroma

Creí hoy verte sumergida en el lago de mis recuerdos, carecías de maldad y tu accionar era una cándida reacción de tu pureza
Pero no tenias aroma

Solo respiraba la estrecha verdad que me otorgases en una mágica amistad; el aroma de unas flores que se desprendieron tras nuestros correteos esos hoy inhala mi vida, tras ver víctima de un penoso asma depresivo.
Pero no tenias aroma

Un barato olor a ciudad de seres inertes a la verdad no obstaculizo tu abstracta fragancia, tal vez seas una hoja que voló a través de aquel poblado, cogiendo mi tristeza eras tú un rastro hoy guardado en un cofre hecho de paz, que hoy ventilo a la luz que en ese año me otorgo la vida.
Pero no tenias aroma

Las charlas eran coplas de una música que armoniosamente sugirieses como un pago dado a tu amigo desvelado en problemas, tu paso cogió la acera y no dejo una huella acá en esta mi ciudad, nadie quizás hoy tu nombre recuerde, pero ese paso dactilar toco música a mis oídos y de esos ya nunca saldrían mas.
Pero no tenias aroma

Un niño de aquella “Mala” no se percataba en saber que ese valioso tiempo sería un paso fugaz que aun hoy delibero, si aun escarbo en una oración tu bella y grata significación, siempre resguardaste mis espaldas…… ese año no temí, pues quien pudieseme herir al tener la hoja de aquel otoño como un escudo de inocente verdad. He narrado nuestro pequeño y gran secreto que cargado de anécdotas acaricia hoy un sueño de una pronta escena de un libro que aun no creo escribir.
Pero no tenias aroma

Era una mágica plazuela un lugar que aun creo que conserva estas charlas un ¿Cómo te va? Un ¿estás bien? Era esa la fracción de un desinteresado cariño. A veces reías…… muy pocas veces te veía llorar.
Pero no tenias aroma

Una danza así la hicimos jactar en un año de nuestras vidas, ya la posta médica no queda allá al frente de la plaza, los arboles de antiquísimas escenas hoy fueron desprendidas de raíz…… “nunca pusimos nosotros nuestros nombres allí"
Pero no tenias aroma

Eras la niña traída de un sueño, una esculpida estatua de valor, una risa abierta a todo rincón cogiese mi llanto y lo arrojasen por las ventanas de aquel salón. Eras sagas a la hora de aprender, muy locuaz a la hora de debatir y muy prudente en el momento de objetar si algo no era justo, ni carente de un peso agraciado a la verdad.
Pero no tenias aroma

No sé como Dios ideo crear a un ser calado en brillantes…… eras solo una niña ¿Qué de raro tenias?.... pero el Señor Él y su gran criterio divino salva hoy mi vida, toda caricia fallida da factura a mi gran error.
Pero no tenias aroma

Y aquella hoja ese año voló…… nunca supe cuando se fue…… y jamás en mi vida sabré como apareció otra vez. Y al recitar unos mandamientos que calmase mi dolor…… al verte cara a cara hoy hecha una mujer descubrí en ese instante tu verdadera fragancia.
Si tú eras el aroma de una flor dada para el primer amor, tus palabras eran un dulce manjar, un perceptible olor al horno de tu sagrado entendimiento.
Si eres el aroma de aquellos robles arrancados de “la plazuela encantada de Mala” mas no sersionado de mis recuerdos.
Si no eras tú solo una fragancia, eras mil y un especias de perfumes. Tu llanto palpe y una nostalgia acumulo la ausencia de varios años, si era el aroma entrelazado de la extrañeza, pero denoto que eres virtud, un exquisito recuerdo que hoy apetezco degustar, porque si tenias aroma

¡sí!.... “el aroma de nuestra amistad”

“para la niña de aquel otoño”