#EscritoresCostarricenses
Yo soy un campesino... Las montañ… embalsamaron mi niñez riente; aprendí de las flautas de la fuent… y de las aves églogas extrañas. Los vientos que retozan en las cañ…
Zapatos rotos, roto el sombrero, la piel curtida por los calores, pasa el jocoso titiritero para el poblado de labradores. “¡Baile a Perucho!” le gritan tod…
Rojo: así son los labios de las ni… el tinte del crepúsculo, la rosa de Sión y el arrebol de la sabrosa granada que sazona en mis campiñas… Azul: así el color de las montañas
Por la vereda que baja al yurro marchan dos mozos bajo la tarde; hay en los fuetes como un susurro y el Sol poniente parece que arde. Ella es descalza, de trenza doble,
Moradas cual la túnica de Cristo, columpiando sus pétalos de seda, en mis bosques nativos las he vist… donde el sinsonte al manantial rem… Caprichos de amatista suspendidos
El gallo ese clarín de la primera luz alza el canto anunciador del d… y la gente devota en romería, invade la polvosa carretera. La viuda, la casada y la soltera
Hay regocijos en la cabaña tiende la tarde rojos cendales y dos carretas llenas de caña vienen vibrando de los cañales. Crujen las mazas dando sus vueltas
Hay un olor de vida en el huerto, en el aire y en las… es un olor a tierra humedecida que va anunciando la precoz venida de la mies y del fruto y de las ro…
Cantan los gallos, es la del alba, “coge las bestias –dice el abuelo– hay ya clarores sobre el Turrialba y las palomas bajan al suelo.” “Muchachas, vamos, arriba todas,
Hay una imagen de Santa Rita en cuyo rostro muestra candores, las mozas llevan hasta su ermita de las montañas las frescas flores… Las tristes viudas que llevan luto…
La muerte es un matiz de la existe… morir es florecer en otra forma; la caduca materia se transforma en ser nuevo, en rosales o en esen… La vejez es la humana inconsistenc…
Dilúyense en las auras aromas de v… y el Sol pone en la ermita nenúfar… desciende de las abras el rústico… y cantan sus estrofas de vida las… Parece que anunciaran sus triunfos…
Allá en el camposanto que esmaltan las auroras de amaran… y las tardes de sándalo y carmín, allá donde la hiedra abraza con amor la cruz de piedra
Zas... zas... Resuena el tajo ent… bajo el sol que los páramos rescal… y dobla pudreorejas de esmeralda que simulan encajes en el seto. El fresco manantial discurre inqui…
Seméjase a una esfinge de pedernal… erguida ante el abismo del piélago… sobre ella el Sol despunta doscien… y ante ella el mar levanta su cant… El fuego del verano, las lluvias d…