#EscritoresPeruanos
Es posible que la sombra Sea un animal que nos protege Del exceso de luz. O que tal vez La verdadera sombra Sea un ciervo
Levanto una mano A la altura del ombligo y con la o… Sostengo el hilo ciego que me llev… Hacía mí mismo. Penetro en corred… Me estrello contra bilis nervios e…
Entre un zapato y un guante Hay corbatas sacos y pantalones Insolentes hay una glándula amaril… Que me llena de ternura Y maravilla
center No hay poesía hay solamente Vida. Lo que pasa es que la gente No sabe que la poesía Es vida y sobre todo
Quién sabe en qué brazo divino, al… La oscura vivienda terrestre repos… Cuando sobre la nieve de casas dor… El mágico gallo su alba sostiene,… Dorado que asoma en la noche. Ser…
Si la mitad de mi cuerpo sonríe La otra mitad se llena de tristeza Y misteriosas escamas de pescado Suceden a mis cabellos. Sonrío y… Sin saber si son mis brazos
Puede ser que Dios sea una esfera Tan grande pero tan grande Y a la vez tan pequeña Que nunca podremos verla Ni tocarla. Puede ser también
Si el corazón se nubla el corazón La amapola de carne que adormece Nuestra vida el brillo del dolor a… El cerebro en la sombra y riñones Hígado intestinos y hasta los mism…
Hoy quisiera hablar de mi conciert… De trapos de mi saxofón De terciopelo azul de mi clarinete Que sube y baja como el sol Hasta alcanzar la divina incandesc…
Veo las líneas de Nazca En la palma de mi mano veo La cola del mono en mi cerebro Y muchas otras líneas Que atraviesan mi pupila
La luz que solamente es luz Cuando ilumina una cosa No es luz verdadera. La luz Que pasa velozmente y no deja somb… Que todo lo sostiene y lo anima
Óyeme tierra, así, escribiendo así… En la espesura de pámpanos dormido… Mi pecho frío junto a mis intestin… Se ha cuajado. Mis dedos alhajado… Buscan el Árbol de la Noche, clav…
Adoro tus piernas desnudas Adoro todo lo que nace Y lo que muere entre ellas Hay un manantial de aguas sagradas En su centro de mariposa
Cerebro de la noche, ojo dorado De cascabel que tiemblas en el pin… Yo soy el que llora y escribe en e… Palomas y níveas gradas húndense e… Y ante mi cabeza de sangre pensand…
Habitaciones dolientes de esta cas… Cuyas puertas se abren con sed a l… Hay en ellas una madre y una espos… Cuya permanencia en el polvo es co… Plato de frijoles, una nube o una…