#EscritoresMexicanos (1977) Circuito Pausa interior mínima
Lily me espera a las 11 en el puen… al pie de San Juan Nepomuceno, sa… santo de agua, mudo, ahogado. Lily cree en Dios y yo corro haci… y hacia el río y después
Podría Escribir Ayer y hoy La historia De un paso
Regularmente Hago Una Vida Bastante
Te repito que descubrí el silencio aquella lenta tarde de tu nombre m… carbonizado y vivo en la gran llama de oro de tus die… Mi amor se desligó de las auroras
Tú no veías el árbol, ni la nube n… Ya tus ojos la tierra se los había… y en tu boca de seda sólo un poco… fugitiva de rosas, y un lejano sus… No veías ni mi boca que se moría d…
Más despacio que nunca, casi agóni… marchan y duelen estas voces o est… Húmedos pies descalzos, breves pie… dulce origen, impío desorden. Voce… que purifican lo que tocan. Voces
Te saludan: los árboles y las banderas triunfa… los pájaros y los ríos del pueblo, las ágiles canciones del pionero, las películas a colores y las foto…
Gentil, justo y resuelto... Duerme bajo las rosas. Rosas de Hyde Park: las rosas de su sueño. Gentil, justo y resuelto,
El gran río penetró la roca viva y se adelgazó hasta el miedo y el… se hizo rayo se hizo ruina se hizo… y hoy padece a lo largo de pieles… a la orilla del cocodrilo que me s…
Agua dulce, agua amarga, agua de soledad, agua de nada, agua quebrada para el verde amor y la amarilla piedad; agua sin sombra para el aire
Las paredes tienen oídos, vientre y sangre. Pero que no lo sepa el aire, que lo ignoren el invierno y el vendedor de esponjas;
Fuiste cuando el silencio era una… cuando sabias corolas daban el equ… y claras lunas tibias como pequeña… llevaron al abismo los insomnios p… y los deseos por vivos y angustiad…
Ardía el caballero con sus ojeras… llameaba su piel e iluminaba la ci… Moría de hambre el capitán Fiallo acostado en su lecho de una bruta… y un leño por almohada
Andar así es andar a ciegas, andar inmóvil en el aire inmóvil, andar pasos de arena, ardiente cés… Dar pasos sobre agua, sobre nada —el agua que no existe, la nada de…
Ciudad que llevas dentro mi corazón, mi pena, la desgracia verdosa de los hombres del alba, mil voces descompuestas