Dori Gómez
La noche huele a primavera, a piedra fresca, y a humo lejano de hojarasca. Huele a gato, a farola, a silencio y a montaña.
Noche de luna su cuerpo se movía silencioso en aquel bosque el corsé le ceñía la cintura y aumentaba su pecho
Gira sobre si mismo ramas abiertas mirada infinita Olor a otoño de frutas y manzanas
Ese poema me contó amores tuyos, Y lo rompí. En la ciudad parejas paseando,
Aunque no lo creas siempre te quis… pero a veces los días son oscuros… preferí alejarme a hundirte en mi… Focos de luz alumbran mi ansiedad miedos en mi piel se desatan
Cuándo me invitaron a la boda, sinceramente no me hizo mucha gracia, al fin y al cabo ya no eramos familia, hacía tiempo que me había divorciado, por otro lado si no iba pensarían que e...
Arrancarme la piel a tiras sentirme morir día a día no distinguir el alba del crepúscu… dentelladas en el corazón las venas largas saliendo sangre a…
Al fin del mundo iría y corriendo por ti si lo dijeses, más... ¡duelen los pies!
Besan el lago esas flores de loto, suspira el aire. Tallo poemas en esas escaleras,
Entre todos los mares, en todo el mundo, nunca hubo una tierra como la isla de Eroda. Con la inequívoca forma de un ceño fruncido, es el hogar de un olvidado pueblo marinero que de form...
Lágrimas de hielo resbalan lentamente, amores perdidos poemas inacabados; un cielo negro
Otea el lobo la nevada del bosque que bella estampa del cielo añil nuboso día de frío y hambre.
Qué azul el cielo Campo de margaritas atardeciendo. Pico nevado árbol de flor de fuji
Mi vida estando juntos me harás mis comiditas serás mi ama de casa. ¡pies no andan, vuelan! Hoy de peluquería
Rotas mis alas, jamás podré volar, fragmentos de mi vida; los esparciste: como polvo de estrellas