Qué mala suerte es recordarte. Te fuiste sin decir adiós, sin cer… Suerte poder borrarte de mi memori…
Éramos como dos mundos distintos y…
Existía una anciana, percudida hasta los huesos por el paso de la vida pero con el alma intacta, cuidando su cajón y sus recuerdos. Un día llegó un semi diluvio que inundó hasta la capi...