A los censores Se pasaron la vida diseñando un pa… que recobrase—después de cada ejec… su inocencia perdida. Y apareció el patíbulo,
Mi absurda persuasión abriéndole c… pero la poesía no entra. Ella no elije noches para entrar.… dominio impone –como afirman– de n… A cualquier hora el mundo la despl…
y ahora, vámonos, cuervo, no a fecundar la… que ha parido y llena el mundo de alas negras. Vámonos a buscar sobre los rascaci…
Mira esta primavera que ha llegado… y gira sobre las estaciones. Mírala cómo llena las plazas de M… ¿Qué haces tú, solitario, que no v… Gruñón, ¿qué estás haciendo
Cada noche me libras de la corona turbia que amenaza las horas de mi felici… y llegas en puntillas lentamente y me arrancas los ojos de humanist…
Se pueden ver a lo largo de toda… Verdes o rojos o amarillos, descas… y el sol, verdaderos paisajes de e… de guerra. El viento arranca los letreros de…
Hace tiempo te había prometido muc… poemas de amor y –ya ves– no podía… Tú estabas junto a mí y es imposible escribir sobre lo q… Lo que se tiene siempre es poesía.
Dirán un día: él no tuvo visiones que puedan aña… No poseyó el talento de un profeta… No encontró esfinges que interroga… ni hechiceras que leyeran en la ma…
Una muchacha se está muriendo entr… Dice que es la desconcertada de un… Que anduvo noche y día para encont… Que ama las piedras grises de mi c… Dice que tiene el nombre de la Re…
No pudimos hacerla florecer en el… y la dejamos en el jardín, que es su lugar natural.
Hace algún tiempo como un muchacho enfurecido frente… en poner trampas para que nadie se acercara, nadie sino el más hondo,
De un rumor creciente y voluptuoso se llenan para mí los días. Dispongo de este mundo exasperado
El hombre que devora los periódico… no está en un circo como los trape… candela. Si hace un poco de sol se le puede… parques nevados o entrando en el M…
Los viejos poetas, los viejos maes… duchos en el terror de nuestra épo… todos a morir. Yo sobrevivo, lo que pudiera calif… entre los jóvenes.
Conozco el manuscrito de Pasión de Urbino, sus muchas, y ahora compruebo que insuficientes, modificaciones, desde 1964. Lisandro Otero solía dármelo a leer después de cada revisión. A i...