#1988 #EscritoresUruguayos #VientosDelExilio
En la sala repleta circuló un aire helado cuando don Luciano, con todo el peso de su prestigio y de su insobornable capacidad de juicio, al promediar su conferencia tomó aliento para de...
La soledad es un oasis está en litigio no tiene sombra y es puro hueso la soledad es un oasis
Lluvia regen pioggia pluie crea cúpulas vértigos confianzas sencillamente cae sobre tus hombro… golpea en el paraguas que no puede sentir que llueve en cuatro en och…
Las voces de abajo vidalitá están casi mudas pero los gendarmes vidalitá
Señor molusco caballero lapa ya sabés en qué malos paso ando conocés mis esquinas y mis fobias mis bares mis amores mi bufanda conocés las puteadas que rezo desp…
Viviste aquí por meses o por años trazaste aquí una recta de melanco… que atravesó las vidas y las calle… hace diez años tu adolescencia fue… te tajearon los muslos porque no q…
Los sueños son pequeñas muertes tramoyas anticipos simulacros de m… el despertar en cambio nos parece una resurrección y por las dudas olvidamos cuanto antes lo soñado
Todo verdor perecerá dijo la voz de la escritura como siempre implacable pero también es cierto
A medio metro de mis botas recién… el surco es una secreta y monstruo… hay que considerar que desde mis d… desgraciado yuyo y aun tengo serias dudas sobre ese…
El 21 de noviembre de 1975, Buenos Aires empezó siendo una mañana fría, soleada, menos húmeda que de costumbre. Como todos los viernes, las calles del centro eran desde temprano u...
A sus treinta y cinco años, Ileana Márquez tenía marido (Dámaso) y amante (Marcos). Saberse querida, o al menos deseada por ambos, no le causaba la menor ansiedad, más bien le otorgaba ...
Creo que mi ciudad ya no tiene con… entre otras cosas porque me ha per… o acaso sea pretexto de enamorado que amaneciendo lejos imagina sus arboledas y sus calles blancas
Claro que ya me voy uno regresa siempre pero entendámonos vuelvo porque me sufro y no porque me encante
De pronto comenzaron a llorar las criaturas los perros en el ángelus las vírgenes propensas los ancianos a término
A Joaquín Manso siempre lo había conmovido la unan… gracias a ella no se había fatigad… alzaba su voz de falsete en el cor… participaba en los brindis de los…