#1989 #DespistesYFranquezas #EscritoresUruguayos
Los árboles ¿serán acaso solidarios? ¿digamos el castaño de los campos… con el quebracho de entre ríos o los olivos de jaén
Cada ciudad puede ser otra cuando el amor la transfigura cada ciudad puede ser tantas como amorosos la recorren el amor pasa por los parques
La calumnia como hiroshima de bols… el desierto como adversario unánim… el silencio como razón de estado la hipocresía como recoveco de la… el desamor como metáfora de fuego
De pronto uno se aleja de las imágenes queridas amiga quedás frágil en el horizonte te he dejado pensando en muchas co…
Si a uno le dan palos de ciego la única respuesta eficaz
Vamos mengana a usar la maravilla esa vislumbre que no tiene dueño afilá tu delirio armá tu sueño en tanto yo te espero en la otra o…
La vida cotidiana es un instante de otro instante que es la vida to… pero a su vez cuántos instantes no… ese instante del instante mayor cada hoja verde se mueve en el sol
Voy a cerrar la tarde se acabó no trabajo tiene la culpa el cielo que urge como un río
País lejos de mí / que está a mi l… país no mío que ahora es mi contor… que simula ignorarme y me vigila y nada solicita pero exige que a veces desconfía de mis pocas…
Como casi siempre, al descubrirse, el desnudo y la desnuda se asombran de sus desnudeces. Como casi siempre, éstas son mejores que las de la memoria. Por supuesto, son jóvenes. Él es el...
Pobre señor presidente ya no hay nadie que lo aguante nunca hubo aquí gobernante con menos dedos de frente pobre tirano casero
Entre el viejo delirio intimidante convertido en metralla elemental en azote o plomada o nubarrones contra surco alfabeto y guaguancó en astucia falaz pero de llamas
Las modas pasan, los escombros que… * De todos los ismos sólo queda el a… * Los parricidas son huérfanos preco…
Tengo una soledad tan concurrida tan llena de nostalgias y de rostros de vos de adioses hace tiempo
Al preso lo interrogaban tres veces por semana para averiguar «quién le había enseñado eso». Él siempre respondía con un digno silencio y entonces el teniente de turno arrimaba a sus te...