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Sólo una tonta podía dedicar su vi… Sólo una tonta podía morirse al to… si lámpara encendida, desperdiciada lámpara de día eras… Retonta por desvalida, por inerme,
Si hubiera de morir dentro de unos instantes, escribiría estas sabias palabras: árbol del pan y de la miel, ruibarbo, cocacola, zonite, cruz gamada. Y me echaría a llorar. Uno puede ll...
—Estábamos en el paraíso. En el paraíso no ocurre nunca nada. No nos conocíamos. Eva, levántate. —Es de día, pero aún hay estrellas. El sol viene de lejos hacia nosotros y empiezan a g...
No se ha roto ese vaso en que bebi… ni la taza, ni el tubo, ni tu plat… Ni se quemó la cama en que moriste… ni sacrificamos un gato. Te sobrevive todo. Todo existe
Habría que bailar ese danzón que t… dejar mi cuarto encerrado y bajar a bailar entre borrachos. Uno es un tonto en una cama acosta… sin mujer, aburrido, pensando,
—Mira la luna. La luna es tuya, nadie te la puede quitar. La has atado con los besos de tu mano y con la alegre mirada de tu corazón. Sólo es una gota de luz, una palabra, hermosa. Luna...
Bajo mis manos crece, dulce, todas… Me doy cuenta de que tus pechos cr… Mi hijo te está haciendo más dulce… Guardadora, te amparo contra todos…
Lloverás en el tiempo de lluvia, harás calor en el verano, harás frío en el atardecer. Volverás a morir otras mil veces. Florecerás cuando todo florezca.
Mientras los niños crecen, tú, con… poco a poco te acabas. Yo te he ido mirando a través de l… por encima del mármol, en tu peque… Un día ya sin ojos, sin nariz, sin…
Me acostumbré a guardarte, a lleva… que lleva uno su brazo, su cuerpo,… No eras distinto a mí, ni eras lo… Eras, cuando estoy triste, mi tris… Eras, cuando caía, eras mi abismo,
¡Qué costumbre tan salvaje esta de enterrar a los muertos!, ¡de matarlos, de aniquilarlos, de borrarlos de la tierra! Es tratarlos alevosamente, es negarles la posibilidad de revivir. Y...
Dice Julito que este soldadito de plomo que tiene en la mano recibió un balazo en la nuca y cuando estaba en el suelo vino una serpiente y le mordió la pierna. —Éste ya no sirve, dice,...
Me encanta Dios. Es un viejo magnífico que no se toma en serio. A él le gusta jugar y juega, y a veces se le pasa la mano y nos rompe una pierna o nos aplasta definitivamente. Pero esto...
Te quiero a las diez de la mañana, y a las once, y a las doce del día. Te quiero con toda mi alma y con todo mi cuerpo, a veces, en las tardes de lluvia. Pero a las dos de la tarde, o a...
Soy mi cuerpo. Y mi cuerpo está triste, está cansado. Me dispongo a dormir una semana, un mes; no me hablen. Que cuando abra los ojos hayan crecido los niños y todas las cosas sonrían....