#EscritoresArgentinos
Yo seré a tu lado, silencio, silen… perfume, perfume, no sabré pensar, no tendré palabras, no tendré dese… sólo sabré amar. Cuando el agua caiga monótona y tr…
Mi corazón es como un dios sin len… mudo se está a la espera del milag… he amado mucho, todo amor fue magr… que todo amor lo conocí con mengua… He amado hasta llorar, hasta morir…
Señor, Señor, hace ya tiempo, un… soñé un amor como jamás pudiera soñarlo nadie, algún amor que fuer… la vida toda, toda la poesía. Y pasaba el invierno y no venía,
Señor, mi queja es ésta, Tú me comprenderás; De amor me estoy muriendo, Pero no puedo amar. Persigo lo perfecto
Me levanté temprano y anduve desca… Por los corredores: bajé a los jar… Y besé las plantas Absorbí los vahos limpios de la ti… Tirada en la grama;
Hay un cisne que muere cercado en… Un cisne misterioso de ropaje de s… que en vez de deslizarse en la cor… se estanca fatigado de mirar el es… El cisne es un enfermo que adora a…
Ahora quiero amar algo lejano... a algún hombre divino que sea como un ave por lo dulce, que haya habido mujeres infinitas y sepa de otras tierras, y florezc…
Hoy me mira la luna blanca y desmesurada. Es la misma de anoche, la misma de mañana. Pero es otra, que nunca
Tengo el presentimiento que he de… Esta cabeza mía se parece al criso… purifica y consume, pero sin una queja, sin asomo de h… Para acabarme quiero que una tarde…
Pudiera ser que todo lo que en ver… no fuera más que aquello que nunca… no fuera más que algo vedado y rep… de familia en familia, de mujer en… Dicen que en los solares de mi gen…
Por diez centavos lo compré en la… y vendiómelo un ángel desgarbado; cuando a sacarle punta lo ponía lo vi como un cañón pequeño y fuer… Saltó la mina que estallaba ideas
A pesar de mí misma te amo; eres t… como hermoso, y me dice, vigilante… «¿Para esto elegías? Gusto bajo e… no te vendas a nada, ni a un perfi… Y me dicta el deseo, tenebroso y p…
No tienes tú la culpa si en tus ma… mi amor se deshojó como una rosa: Vendrá la primavera y habrá flores… El tronco seco dará nuevas hojas. Las lágrimas vertidas se harán per…
Las dulces mensajeras de la triste… son avecillas negras, negras como… ¡Negras como el dolor! ¡Las dulces golondrinas que en inv… y que dejan el nido abandonado y s…
Siete veces hicimos en media hora el mismo camino. Íbamos y volvíamos al lado de la verja de un jardín, como sonámbulos. Respirábamos la humedad nocturna y olorosa que subía de los cant...